Entrenamientos de Marcus

por **Marcus** Dom Oct 08, 2017 9:17 pm

El Saiyajin, se encontraba avanzando por todo su trayecto esperando a ver adonde lo llevaría el destino llegando entonces a una isla por lo que pudo comprobar ya que estaba totalmente rodeada por agua. Era gracioso pero a la vez curioso que ande totalmente vacía lo cual no dudo en aprovechar, ya que era una total ventaja para los de su raza a fin de cuentas podría entrenar con todo sin tener que rebajarse por alguien. Comenzando entonces su avance por el lugar hasta llegar a una zona muy arboleada y rocosa lo cual podría servirle como inicios para su arduo entrenamiento, que recién empezaría en aquel lugar empezando primero por concentrarse en incrementar algo esencial en batalla el cual era su puñetazo lanzando primero varios al aire como mero calentamiento mientras iba progresando tratando de llegar a cierto número antes de ponerse a golpear ciertos objetivos, lo cual aunque fuera un poco doloroso debía de esforzarse o nunca podría avanzar como Saiyajin y eso le molestaba bastante en especial por su orgullo y aunque no llegase a conocer a ningún otro Saiyajin, era complicado no hacer algún tipo de entrenamiento que lleve a volverlo increíblemente fuerte aunque apenas estaría comenzando no debía sobrepasar lo que podía hacer su cuerpo.

Consciente de hasta sus actos el Saiyajin de bufanda, comenzaría con su rutina de entrenamiento en aquella isla solitaria y sin ninguna interrupción de nadie lo cual era bastante benefician te ya que no habría heridos por desatar su mayor potencial, aún así debía de ser algo cuidadoso para no destruir por completo la isla a causa de su entrenamiento así que siguió pero con breves pausas para poder descansar correctamente y ver que podría hacer ahora para incrementar sus puñetazos, ya que inicialmente golpeaba troncos o rocas de un tamaño menor y quizás más ligero claramente por lo tanto ahora seguía ir al próximo nivel. Formulo para si mismo cuando empezó a golpear con ambos brazos los diferentes objetivos que tenía en mente ahora los cuales eran claramente troncos, más grandes tratando de atravesar los con sus puñetazos y volver polvo las rocas con los mismos, los cuales de a poco se irían adaptando a aquella fuerza.

─Veamos que puedo hacer con esto...─

Sí quería ser alguna vez un Saiyajin, muy poderoso necesitaba tener una amplia habilidad en el arte físico ya que más era ese su estilo que utilizando el Ki, concentrándose plenamente en realizar de diferentes maneras veloces golpes con ambas manos tratando de está forma poder hacer que se acostumbrarán de a poco a su estilo, moviéndose ahora mientras realizaba los golpes para hacer todo mucho más difícil y complicado a fin de cuentas no era mucho lo que podía hacer pero al menos sería suficiente o eso pensaba, pero quería seguir su sangre Saiyajin, le impedía no excederse a fin de cuentas siendo un guerrero no podía darse el lujo de quedarse sin entrenar, teniendo una vida normal y pacifica en el mundo humano cuando ni siquiera podía tener un nivel que lo llegué a satisfacer. Siguiendo así un buen rato claramente con una determinación increíble, a pesar de la edad del joven Saiyajin, demostraba ser alguien con un gran potencial que quería alcanzar nuevos horizontes. Por lo que podía notar la raza humana era de un perfil muy bajo al no ser guerreros, así que era inútil ponerse a entrenar con ellos o bueno eso podía llegarse a pensar entrenando lo más que pudo en aquel lugar hasta cansarse bastante y ya viendo que era suficiente por el momento el Saiyajin, se fue a descansar, estando satisfecho con sus resultados de momento no podía pedirse mucho o cometería un grave error dando fin al fuerte ejercicio que había hecho en la isla por ahora.

por **Marcus** Dom Oct 08, 2017 9:52 pm

Luego de haber entrenado la vez pasada el joven Saiyajin, velozmente regreso a la misma zona de entrenamiento, en la que había empezado todo a fin de cuentas debía continuar, aprovechando que estaba totalmente desierta sin duda había encontrado un buen lugar ya que parecía que nadie llegaba a esa isla como si no existiera en el mapa de ese mundo. Tenía sus dudas como cual sería el requisito para transformarse en la gran leyenda de los Saiyajins, pero a fin de cuentas como no encontraba una forma exacta de alcanzar dicha transformación iba a serle mucho más complicado llegar dando un suspiro de decepción unido a cierta pereza, por no poder transformarse aún pero sabia que tenía el potencial ahí mismo solo debía seguir entrenando hasta alcanzarlo.

─Bueno vamos a ver por que parte empezar.─

Ya en una zona donde poder usar correctamente sus habilidades, y adaptando una pose ofensiva de combate y empezó a lanzar veloces puñetazos al aire primero aparte de unas cuantas patadas, para empezar con un buen calentamiento si no quería que ningún hueso se le partiera, debido a precipitarse con el entrenamiento lo cual si lo hacía podría ser muy perjudican te a futuro concentrándose plenamente en tener un calentamiento que sirviera al menos, para la mayor parte de lo que vendría posteriormente. Ya finalizado el Saiyajin, velozmente empezó a moverse en linea recta mientras iba atacando con gran ferocidad aunque tenía una precisión mucho mayor que en la de la anterior vez, gracias a la experiencia que había obtenido por su primer entrenamiento siendo esto esencial en un guerrero, uno inexperto no podría hacer los movimientos con el Golpe Fuerte, como lo hacía este ya que al menos tuvo un entrenamiento base y no había empezado desde cero aunque era muy complicado de proseguir, ya que de a poco iba quedándose sin objetivos. Suspiro con pesadez para luego volver a intentar destrozar pinos y rocas, está vez en una zona más ampliada de la isla donde corrió con la suerte de encontrarse con objetivos de mayor tamaño aprovechando la ventaja que tenía empezaba a usarlos como si fueran un oponente, haciendo como si fuera esparring, a fin de cuentas necesitaba mejorar lo mejor que pueda en el tiempo que le quedaba para llegar pronto a la legendaria transformación, que tanto se rumoreaba el planeta Vegeta aunque no sabía cuantos tenían acceso ni la llave para está, solo sabía que era una que incrementaba enormemente el poder del Saiyajin, a tal grado de volverse una leyenda eso si que era poder.

Se concentraba cada vez más con cada golpe que daba para ver que podía llegar a alcanzar, podía llegar a conformarse con alcanzar ese esplendido nivel exclusivo de Saiyajins poderosos, pero no por eso debía desviarse solo por el poder y lo sabía debía de tener una meta relativamente grande para no querer ceder siquiera un instante, fijándose en sus objetivos los cuales ya estaban algo destrozados cerro los ojos y dio un largo suspiro, para volver a abalanzarse hacía sus propios objetivos empezando una ráfaga continúa de puñetazos, tratando de atravesar lo que encuentre a fin de cuentas era esencial en su entrenamiento llegar a niveles increíblemente altos, aunque sabia que su poder por ahora estaría muy inferior de lo que deseaba llegar pero pronto sería un guerrero reconocido. Finalizado su entrenamiento este se fue alejando de la zona tranquilamente luego de tanto entrenar, debía tomar un buen descanso y no pasarse.

por **Marcus** Dom Oct 08, 2017 10:54 pm

El Saiyajin, luego de haberse esforzado tanto en los últimos dos entrenamientos y haber descansado lo suficiente sus músculos, para asegurarse de no hacerse ningún daño volvió nuevamente a la isla de entrenamientos nombre que le había dado inconscientemente él, ya que no era descubierta por ningún otro individuo aparte de estar muy alejada y por supuesto ser lo suficientemente grande para resistir, los arduos entrenamientos del joven Saiyajin, quien aún no demostraba mucho de su verdadera capacidad y poco a poco comenzaba a incrementarse bastante su nivel de poder y habilidad gracias a los diversos entrenamientos que ha estado haciendo. Aterrizo en la isla ya más relajado y ahora con un nuevo objetivo en mente el cual era aprender una nueva técnica que pueda llegue a serle útil en el futuro, comenzando primero a llevar sus manos hacía su espalda y fijándose en una ruta que este más o menos despejada dando la vista al mar para seguidamente disparar una ráfaga de energía, había sido algo fácil pero sentía que aún le faltaba dominar algo aquella técnica por lo tanto volvió a re intentar hacerla, concentrando el Ki, en la palma de sus manos haciendo notar aquella esfera azulada que se iba agrandando ha medida concentraba su Ki. Para finalmente dispararla con gran fuerza y eficiencia tratando de está forma llegar a perfeccionar la, claramente aunque la haya aprendido reciente por meros rumores del mundo humano sentía que podía llevarla más allá pero por el momento se conformaría con el nivel que había alcanzado con la misma, a fin de cuentas no se podía pedir mucho o de lo contrario podría llegar a sonar muy exigente pero solo por precaución y asegurar su buen dominio de la técnica empezó a concentrar Ki una vez más, empezando a nombrarla por la forma en la que había oído a través de ese planeta.

─¡Ka... Me... Ha... Me... HA!.─

Dichas aquellas palabras salió disparada aquella poderosa ráfaga de energía de colores entre blancos y celestes, claramente había sido un reto muy simple para el Saiyajin, por lo tanto paso a la siguiente fase de su entrenamiento lo cual sería mejorar aún más algo que ha estado practicando desde hace tiempo atrás, lo cual era su famoso Golpe Fuerte, buscando primero la zona necesaria para empezar entonces a entrenar incansablemente haciendo hasta esparring, con sus objetivos que ahora eran grandes árboles y pinos aunque comenzaba a notar que había cierta diferencia en sus movimientos, a fin de cuentas podía llegar a desplazarse muy bien y demás teniendo un perfecto dominio del Golpe Fuerte pero sentía cierta impotencia, claramente una rara impotencia de no poder llegar al nivel que deseaba ya que tenía ciertos motivos como proteger lo que laguna vez fue el orgullo Saiyajin, no sabía siquiera si quedaban más que él quien creció solo en el planeta tierra. El como haya acabado el planeta Vegita, era totalmente desconocido para él comenzando entonces a emanar un extraño Ki, por la impotencia que llegaba a sentirse era raro y a la vez curioso lo que comenzaba a expulsar de su cuerpo era como una rara energía dorada pero ni consciente era de ello, como si se manifestará a través de su ira e impotencia claramente aunque sonará estúpido estaba enfadado inclusive consigo mismo tan solo por llegar a ser un Guerrero débil, no había otra razón para mandarlo a un planeta donde todos son enormemente inferiores en poder, exterminar la raza humana era inútil ya que aunque se vuelva su nemesis no serviría en lo absoluto, ¿para que destruir algo sin convicciones primero?, era una buena pregunta para el Saiyajin.

Su cabello de a poco empezó a erizarse y sus pupilas desaparecieron comenzando a cambiarse levemente su tonalidad por momentos, esas sensaciones eran las más extrañas que podía llegar a sentir, impotencia de no llegar a tener el poder suficiente para defender sus ideales... Esa era su convicción pero sin embargo era sobrepasada siempre por algo que lo mantenía en los limites, y sabia mejor que nadie que si no rompía esos limites podía llegar a volverse un gran problema a futuro, manteniéndose así como elevando su Ki, destrozándose el piso a su alrededor y elevándose alrededor del Saiyajin, el cual luego de unos buenos instantes libero un fuerte grito.

─¡AHHHHHHHHH!.─

Extrañamente ahora era rodeado por una aura dorada e inclusive sus pupilas cambiaron a un color verdoso, y su cabello a una tonalidad rubia sorprendido por la fase que había logrado alcanzar se miro unos instantes las manos.

─¿Está es la legendaria forma de la que hablaban?....─

Dijo con gran sorpresa pero luego puso un rostro serio, como por instinto ya que ahora que se había transformado en el legendario Super Saiyajin, tan reconocido y temido en el planeta Vegita, empezó velozmente a desplazarse por la zona lanzando veloces golpes, tratando de acostumbrarse bien a esa forma haciendo inclusive esparring, destruyendo ahora con una enorme facilidad sus objetivos, era increíblemente lo que había alcanzado pero aún estaba lejos de llegar a lo que deseaba. Concentrado en sus objetivos, continuó lanzando golpes y viendo que tan lejos podría llevar aquella transformación llamada Super Saiyajin, para cuando finalizará finalmente por el agotamiento destransformarse ya conociendo la manera correcta para hacerlo. Ahora con la nueva forma dominada al menos de momento el Saiyajin, empezó a retirarse de la isla, con una sonrisa leve dibujada en su rostro a fin de cuentas logró su objetivo ahora debía seguir avanzando de esa forma si quería llegar a nuevos horizontes y algún día enfrentarse a muchos guerreros extremadamente fuertes.

por **Marcus** Mar Oct 10, 2017 8:45 am

El Saiyajin, luego de haber finalizado al menos con una buena parte de su entrenamiento logrando alcanzar la fase tan esperada del Super Saiyajin, regresó volando a toda velocidad hacía la isla para comenzar a ver por donde podía empezar necesitaba aprender no solo a mejorar sus técnicas también a avanzar más en lo que era el poder del Super Saiyajin, no podía quedarse todo el tiempo estancado en el mismo nivel. Al llegar a la isla finalmente este descendió comenzando entonces a expulsar una gran cantidad de Ki, aunque está vez se sintió como algo muy leve debido a que ya estaba acostumbrado a la transformación comenzando entonces a entrenar en aquella fase tratando de superar sus propios limites concentrado de aquel objetivo comenzó a moverse con gran agilidad desplazándose hasta objetivos y lanzando poderosos puñetazos que acabarían por destruir por completo sus objetivos. No por entrenar el Super Saiyajin, significaba que había olvidado el poder que debía aumentar en sus puñetazos que era algo esencial en el combate físico, para guerreros como él a fin de cuentas él era más de combatir cerca que lejos teniendo mucha más ventaja así como guerrero.

Concentrando en su objetivo seguía los veloces puñetazos que destruir cualquier objetivo ya que a estás alturas destruir cualquier cosa en ese lugar era muy sencillo por estar principalmente en aquella fase y no comprimirse para nada. Concentrándose entonces en tratar de llegar lejos al menos con sus nuevos poderes, trato ahora de volar a una alta velocidad mientras golpeaba de una manera que parecía dominar su propio cuerpo tenía que aumentar sus reflejos y demás capacidades físicas y sabia que un entrenamiento así lo ayudaría con esa clase de avance, prosiguiendo entonces el Saiyajin, tratando de al menos alcanzar un buen nivel aunque de por si quizás ya estaba a uno alto, no era como si eso logrará satisfacer al Saiyajin ya que como de costumbre era como los de su raza siempre querían alcanzar nuevas alturas aunque eso significará entrenar por años, de eso era muy consciente y quizás un defecto que pueda tener en su personalidad pero aún así trataba de hacer lo mejor para no alcanzar nuevos niveles lo cual podría ser la meta más complicada hasta el momento, romper sus propios limites y alcanzar otros a fin de cuentas aún estaba por debajo de los niveles que contaban las leyendas acerca de los Saiyajin. Por más que supiera del tema, no se iba a dejar atrasar o desanimar por eso concentrándose plenamente en entrenar sus puñetazos a una alta velocidad pero a la vez se aseguraba de que fuera en zonas donde no cause de forestación o algo así simplemente por querer alcanzar nuevos horizontes, era muy complicado entrenar sin restringirse y terminar destruyendo la isla. Podía sentir que al menos sus puñetazos comenzaban a aumentar su fuerza destructiva lo cual era benefician te y más aún en esa forma destrozando de manera muy fácil una enorme roca, como si no hubiese sido nada. Claramente el progreso del Saiyajin era increíblemente rápido por ende debía centrarse principalmente en seguir con ese ritmo de mejoras para cumplir su meta y quien sabe si algún día llegué a aparecer algún guerrero poderoso por la el planeta Tierra, aunque fuera muy poco probable podía llegar a pasar ya que no descartaba la posibilidad de que por ser un lugar con guerreros de niveles muy bajos de pelea, era fácilmente conquistable ese planeta aunque ese no fuese el interés del Saiyajin, quizás de otros sí lo que lo hacía ponerse a pensar breve mente en todas las posibilidades que había. Tomaba sus descansos como era debido en cada entrenamiento pero aún así no pensaba descansar aún sus puños aún podían dar más.

─Bien, ya he logrado sentir ese aumento de poder pero aún no lo veo suficiente... Pueda que llegué a existir uno más fuerte...─

Balbuceaba para si mismo ya que sabia mejor que otros que no tenía a absolutamente nadie cerca y ya luego de un buen reposo, el Super Saiyajin, se levanto sin des transformarse en ningún momento para comenzar nuevamente a volar en una zona ya predeterminada por él mismo, empezando a destruir cosas a aún más velocidad a fin de cuentas necesitaba aquel considerable aumento si quería volverse el Saiyajin, más poderoso de la historia aunque aún no descubría si era el único sobreviviente de la raza o si había algunos otros ocultos en otros planetas, siendo está una de las tantas dudas que poseía el joven de cabellos parados y rubios de momento. Luego de eso empezó a hacer esparring en el cielo lanzando puñetazos muy fuertes al aire, los cuales se podía notar la gran potencia en ellos debido a como se posaba el viento cada vez que lanzaba un puñetazo, era como si sus poderes hubiesen incrementado de manera muy rápida quizás demasiada para su gusto pero no se des concentro por ese hecho, siendo aún más importante mejorar con aquellas habilidades pero principalmente sus brazos los cuales ahora eran musculosos, resaltando estos por su Dogi aunque fuese de manga larga se notaba la gran determinación que poseía al no querer retroceder en ningún momento, y eso que ya estaba comenzando a sudar de haber lanzando un buen número de puñetazos algo bastante esperado luego de entrenar de manera tan consecutiva aunque sabia que podía llegar a soportar mucho más que eso ya que en ese estado en el que se encontraba, su fuerza se había multiplicado bastantes veces las suficientes como para poder hacer un entrenamiento intensivo muy grande sin mencionar de al menos llegar a los niveles tan deseados que quería, ya sabía que iba por buen camino solo que no era del todo conformista como cualquier Saiyajin existente. Proseguía de está forma hasta que finalmente vio que era suficiente al menos de momento por ende suspiro y se des transformo, empezando a volar hacía otro lugar seguro quizás una capital o algún lugar que pueda llegar a ser seguro y alimentarse como una mon taña pero por ahora abandonaría la isla para descansar lo suficiente.

por **Marcus** Vie Oct 13, 2017 9:30 am

El Saiyajin, volvía a la típica zona de entrenamiento donde solía fortalecerse cada vez más de hecho había desbordando tanto Ki, al grado de volverse un Super Saiyajin, por lo tanto se concentraría para ver que podría hacer si llevaba el Super Saiyajin, aún más lejos y alcanzar nuevos horizontes en su nivel de poder que tan bien podía llegar a mejorar su fuerza en aquel estado concentrado en aquello se convirtió en Super Saiyajin, en el transcurso de su vuelo para cuando una vez llegado a su lugar descender finalmente y así tratar de concentrarse para empezar con su calentamiento.

Lanzo rápidos puñetazos y patadas al aire dando inicio al entrenamiento tan intensivo que iba a reiniciar iniciando a partir de aquel momento donde de a poco iría formando su propio avance, si quería ser un Saiyajin, poderoso necesitaba poder aumentar más allá sus alcances como guerrero lanzando veloces golpes los cuales se veían, como hacía que el aire alrededor de él acabará desatando una ráfaga de viento pequeña o similar a fin de cuentas en esa fase parecía que superaba por mucho la gravedad de ese planeta, provocando que sea muy visible cualquier golpe porque cortaba con el aire como si realizará una presión en el mismo. Continuando su entrenamiento para ver si podría desarrollar aún más poder lo cual sería la meta de esos momentos ir más allá de lo que podía al menos de momento. Luego de finalmente dar el calentamiento necesario a su cuerpo para adaptarse bien a la transformación el Saiyajin, continuo moviendo cosas realmente pesadas, que no pensaban kilogramos si no más bien toneladas, complicando aún más el entrenamiento que tanto había ejercido literalmente había creado una rutina de entrenamiento bastante dura, ya que el ser un Super Saiyajin, no era excusa para no subir enormemente la dificultad de lo que habitualmente hacía, debía acostumbrarse a eso ya que para él las batallas y entrenamientos eran como el respirar sin ellas no se podía siquiera vivir continuando entonces viendo que tanto podría cargar para ver si podría llegar aún más lejos, necesitaba fortalecer bastante sus habilidades ya que aunque en el estado base era increíblemente fuerte en esa transformación lo era aún más incrementando drástica mente sus capacidades lo cual lo hacía un guerrero muy difícil de derrotar y trataría de ser esa clase de guerrero, digno del poder que emanaba por sus venas a fin de cuentas ser un Saiyajin era mucho más difícil de lo que se podría ver a simple vista como raza guerrera acostumbraban a ejercitarse haciendo cada uno más difícil a medida avanzaban sin distraerse ni un simple momento, sabía bien cual era su objetivo en esos nuevos entrenamientos que estaba realizando por lo tanto debía concentrarse plenamente en aumentar su Ki, y habilidades físicas en ese poderoso estado que tanto incrementaba su poder, alcanzar todas las variantes necesitaba ponerle una gran dedicación a cada golpe que realizaba, era todo un orgullo poder descubrir cada vez más de su potencial oculto lo cual hacía que aunque sonará ridículo, lo motivaba aún más a volverse increíblemente fuerte o de lo contrario solo lograría ser la sombra de los Saiyajin, y odiaba esa idea en general aunque eso ya no le preocupaba tanto a esas alturas, luego de tanto entrenar había entendido ciertas cosas y una de ellas era que no debía preocuparse por cosas superficiales, como las opiniones de otros a fin de cuentas así se iba formando un guerrero sin fijarse tanto en detalles tan minúsculos como esos.

─Las cosas van bien pero siento que falta algo... No sé... Tengo una rara sensación, que aún no logró entender del todo.─

Formulo para si mismo porque era verdad, comenzaba a despedir cierta electricidad pero no entendía porque y además de que ni siquiera sentía que había completado la primera fase del Super Saiyajin, concentrándose bastante en su entrenamiento en el cual se dedico a inclusive nadar a altas velocidades para fortalecer sus músculos y demás teniendo en cuenta que eso no funcionaría mucho y lo sabia, por ende al salir del agua, empezaba a elevar su Ki para al menos quitarse algo de toda esa agua encima continuando así su ejercicio en el cielo, realizando veloces combos para el combate en el cual iba desarrollando bastante habilidad y como de costumbre la fuerza era lo más resaltan te de Marcus, al final era el atributo en el que más se había concentrado durante todo su crecimiento desde pequeño y llegada a la tierra por lo tanto entrenaría su ventaja en lugar de volverla algo secundario, seguiría siendo lo principal ya que para un combatiente tan físico como lo era Marcus, combate sin armas a mano limpia era más conveniente desarrollar una gran fuerza a tener una poca cantidad de la misma. Empezaba a jadear un poco pero comenzaba a sentir cierto cosquilleo en su cuerpo, no sabía porque si era porque había entrenado en exceso o no porque había llegado a entrenar mucho más en casos anteriores y había logrado aumentar de manera drástica su nivel de poder eso era algo indudable pero igualmente era raro sentir aquello, era como si su poder comenzará a elevarse por si solo disparando a su alrededor rayos no comprendía el porque de todo eso pero sentía que pronto iba a descubrirlo si se seguía esforzando, a final de cuentas su nivel estaba muy por encima de lo habitual y no entendía el porque si era simplemente ilusión pro su afán de querer mejorar increíblemente su poder o trataba de algo más importante.

─Será posible que...─

El Saiyajin velozmente se preparo apretando sus puños y colocándose en el suelo de la isla, ya en una postura donde obviamente elevaría su Ki, comenzando a expulsar todo el Ki que podía.

─Veamos que sucede si elevo mi poder al máximo. ¡AHHHHHHHHHHHHHHHH!...─

Comentaba seriamente para continuar la gran expulsión de Ki, en la cual el cosquilleo se hizo mucho más evidente y los relámpagos empezaron a rodear lo elevándose las rocas y todo lo demás que lo rodeaba, comenzaba a obtener un nuevo aumento de poder y podía sentirlo, el limite que había tenido anteriormente en el Super Saiyajin, había sido roto finalmente elevándose su poder de manera descomunal creándose una enorme explosión de luz amarillenta que acabaría luego por mostrar al guerrero transformado en la siguiente fase, podía sentir como el nuevo poder recorría por todo su cuerpo y era algo que no se podía dudar, inclusive su cabello había cambiado algo estando algo más erizado y con un mechón resaltan te en su frente, al parecer había logrado alcanzar lo que deseaba comenzando entonces a volar de regreso, acabando finalmente con el entrenamiento ahora.

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